El sol nunca se apaga: el futuro es la energía solar
El cambio climático es una realidad innegable que está cambiado nuestra forma de vivir a lo largo de todo el planeta y que afecta gravemente en su día a día a millones de personas. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, en la última década del siglo XX los desastres relacionados con las condiciones meteorológicas produjeron 600.000 muertes, aproximadamente. Un 95% de esas muertes tuvieron lugar en países pobres.
El cambio climático afecta a la vida de las personas, acabando con ella en ocasiones, o provocando desplazamientos asociados a los desastres y la falta de agua o causando enfermedades asociadas al frío o calor extremo. Asociado al cambio climático está el calentamiento global: los 20 años más calurosos de la historia desde que existen registros han tenido lugar en los últimos 22 años. La tendencia no es especialmente halagüeña para las próximas décadas a no ser que todos los países se tomen en serio el cambio del modelo productivo, la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero o el ahorro sistemático de energía, en otras muchas acciones que servirán, en cualquier caso, para minimizar los efectos de un proceso que, según el 97% de los científicos ha sido causado por la actividad del ser humano.
Mirando al sol
Reducir las emisiones resulta uno de los elementos clave en la mitigación del cambio climático y para ello es vital apostar por energías limpias procedentes de fuentes renovables. Una de las más importantes, debido al desarrollo de la tecnología en los últimos años, es la energía solar.
La importancia de esta energía es tal que las principales potencias del mundo están apostando de manera decidida por ella para reducir emisiones y multiplicar la competitividad de su economía. China, Estados Unidos, Japón, India y Alemania son los cinco países del mundo con más potencia solar instalada según datos del portal PowerWeb.
La energía solar no solo es el futuro, sino que ya forma parte de la realidad presente en decenas de países. El 91% de la capacidad total de energía solar del mundo se ha instalado en los últimos cinco años y no dejará de ir en aumento según la mayoría de estudios del sector. Además, ha sido la energía renovable que más ha crecido, muy por encima de la eólica.
Los pasos adelante legislativos
España también se beneficiará de los se pasos adelante que están dando desde el punto de vista legislativo. Así, el verano pasado el Parlamento Europeo fijó una cantidad mínima del 32% de energía renovable para 2030, dentro del marco de la Agenda de Desarrollo Sostenible implantada por Naciones Unidas que tiene en cuenta el cumplimiento de los 17 objetivos de Desarrollo Sostenible.
Este acuerdo es clave para acabar con el denominado ‘impuesto al sol’ y abre la puerta no solo a la generación concentrada de energía en grandes huertos solares sino a implementar estrategias de autoconsumo y que cada persona pueda instalar en su casa sus placas solares, aumentando así la eficiencia energética de los hogares y reduciendo los costes de distribución de la energía. En cualquier caso, el aumento del autoconsumo depende en gran medida de la legislación de cada país.
Víctor Jorge García González